Ciegos engordando cerditos

El Banco Interamericano de Desarrollo, BID, nos está ayudando a financiar una serie de proyectos en zonas rurales que tienen que ver con las siguientes actividades productivas:

-cultivo de yuca , café, plátano
-cultivo y procesado de sábila (aloe vera) para su venta en el extranjero (champús,cremas)
-producción de miel
-cultivo de hierbas medicinales
-engorde de cerdos

Esta última actividad, la de engorde de cerdos, la está llevando a cabo Proenovis, una asociación de ciegos, de Comayagua. Se les dio una formación para que de manera autónoma sean capaces de cuidar a los cerdos, desde que nacen hasta que se aparean. Los ciegos son capaces de poner las vacunas a los lechones e incluso de reconocer cuándo una cerda está en celo. Algunos de ellos, los de visibilidad muy reducida, son también capaces de procesar (cortar y envasar) productos de cerdo como chicharrones.
Los resultados de esta formación son increíbles. Si alguno piensa que una persona ciega no es capaz de realizar actividades de tipo agrícola o ganadero que hable con Héctor, el chico de la foto. Hace dos años le pegaron un tiro en la cara. Se quedó ciego pero ello no acabó con su hiperactividad. El es el responsable de la granja. Además se encarga de hacer chapucillas como por ejemplo reparar la instalación eléctrica cuando falla, no me preguntéis cómo; incluso ha cubierto las ventanitas de la granja con plásticos para resguardar a los cerdos del frío! Viendo de lo que este chico es capaz uno no se cree que realmente sea ciego.

Este proyecto va a servir de plataforma para que desde Codespa apoyemos nuevos proyectos con discapacitados. De hecho esta semana he estado hablando con una asociación de discapacitados físicos y psíquicos que tienen en mente crear una granja de producción de huevos para chicos con síndrome de dawn. Si uno ya es marginado en este país por ser pobre y de área rural, imaginaos si además es discapacitado. Recuerdo que en la Fundación Vicente Ferrer tenían un programa de apoyo a las mujeres discapacitadas. Trabajan en un taller donde hacen artesanías con yute, tejen ropa o fabrican palitos de incienso. Esos productos son luego vendidos en las tiendas de la Fundación. En el caso de Codespa en Honduras, la idea es apoyar actividades más corrientes, como la cría de cerdos o producción de huevos, productos que son fácilmente vendibles en las comunidades.