Tegucigalpa, 30 de junio, 12.00 h
Tengo dos sentimientos encontrados en este momento. Por un lado alegría porque acabo de ver a Zelaya hablando frente a la Asamblea de las Naciones Unidas y este organismo ha lanzado una resolución condenando el golpe. Por otro lado, tristeza, porque temo que pueda desencadenarse una especie de guerra civil en el país.
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El jueves está previsto que Zelaya regrese a Honduras. Se han ofrecido a acompañarle la presidenta de Argentina Cristina Kirshner y el presidente de Ecuador Rafael Correa. De algún modo quieren con su presencia evitar que Zelaya pueda ser arrestado o incluso asesinado. Un bonito acto de solidaridad.
Nos llegan noticias de que dos batallones del Ejército han dejado las armas y se declaran contrarios a los golpistas. La peor de las hipótesis sería que el Ejército se divida, y que haya un enfrentamiento entre las dos facciones. Creo que al final los golpistas cederán. Cederán porque Honduras no puede permitirse quedarse aislado internacionalmente, no tiene los recursos de Venezuela para permitírselo. Además debemos recordar que este no es un golpe perpetuado por una masa incontrolada, sino por una oligarquía bien organizada y con mucho intereses económicos, los cuales se están viendo seriamente amenazados.
Lo que está claro es que pase lo que pase el día 29 de noviembre hay elecciones, así lo han dicho los golpistas. El problema es que legitimidad tendran todos los partidos que han apoyado el golpe?
Desde mi ventana oigo el ruido provinente de la manifestación a favor del golpe que se celebra en el centro de Tegucigalpa. En estos momentos están cantando el himno nacional, como si fueran los únicos hondureños legitimados para hacerlo. Se lanzan falsas consignas de libertad, democracia, paz. Por la televisión veo que entre los que hablan al público esta el Jefe de las fuerzas Armadas. ¿Pero qué hace ese señor dirigiendose al pueblo? No dicen que es una manifestacion por la paz? Y un militar en el estrado?
Algunos amigos me estáis preguntando mi opinión sobre Mel Zelaya. Ya escribí sobre él hace días. Considero que como presidente ha gestionado el país de manera bastante incompetente. Ha tenido ideas interesantes para favorecer a los más excluidos, pero en general su gobierno ha sido caótico; ni siquiera presentó el presupuesto del año pasado al Congreso para su aprobación. Se le ha comparado mucho con Chávez y se ha dicho que lo que intentaba Zelaya era acabar reformando la Constitución para luego quedarse en el poder. Lo dudo, esto no es Venezuela y no se tiene el dinero que Chávez para su revolución. Pero considero que Zelaya es el presidente electo y por tanto para mi es un símbolo de la democracia en Honduras. Por tanto estoy a favor de que regrese al país y se le restituya. Como yo piensa muchísima gente hondureña que no es pro-Zelaya pero si pro-democracia.
Tengo dos sentimientos encontrados en este momento. Por un lado alegría porque acabo de ver a Zelaya hablando frente a la Asamblea de las Naciones Unidas y este organismo ha lanzado una resolución condenando el golpe. Por otro lado, tristeza, porque temo que pueda desencadenarse una especie de guerra civil en el país.
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El jueves está previsto que Zelaya regrese a Honduras. Se han ofrecido a acompañarle la presidenta de Argentina Cristina Kirshner y el presidente de Ecuador Rafael Correa. De algún modo quieren con su presencia evitar que Zelaya pueda ser arrestado o incluso asesinado. Un bonito acto de solidaridad.
Nos llegan noticias de que dos batallones del Ejército han dejado las armas y se declaran contrarios a los golpistas. La peor de las hipótesis sería que el Ejército se divida, y que haya un enfrentamiento entre las dos facciones. Creo que al final los golpistas cederán. Cederán porque Honduras no puede permitirse quedarse aislado internacionalmente, no tiene los recursos de Venezuela para permitírselo. Además debemos recordar que este no es un golpe perpetuado por una masa incontrolada, sino por una oligarquía bien organizada y con mucho intereses económicos, los cuales se están viendo seriamente amenazados.
Lo que está claro es que pase lo que pase el día 29 de noviembre hay elecciones, así lo han dicho los golpistas. El problema es que legitimidad tendran todos los partidos que han apoyado el golpe?
Desde mi ventana oigo el ruido provinente de la manifestación a favor del golpe que se celebra en el centro de Tegucigalpa. En estos momentos están cantando el himno nacional, como si fueran los únicos hondureños legitimados para hacerlo. Se lanzan falsas consignas de libertad, democracia, paz. Por la televisión veo que entre los que hablan al público esta el Jefe de las fuerzas Armadas. ¿Pero qué hace ese señor dirigiendose al pueblo? No dicen que es una manifestacion por la paz? Y un militar en el estrado?
Algunos amigos me estáis preguntando mi opinión sobre Mel Zelaya. Ya escribí sobre él hace días. Considero que como presidente ha gestionado el país de manera bastante incompetente. Ha tenido ideas interesantes para favorecer a los más excluidos, pero en general su gobierno ha sido caótico; ni siquiera presentó el presupuesto del año pasado al Congreso para su aprobación. Se le ha comparado mucho con Chávez y se ha dicho que lo que intentaba Zelaya era acabar reformando la Constitución para luego quedarse en el poder. Lo dudo, esto no es Venezuela y no se tiene el dinero que Chávez para su revolución. Pero considero que Zelaya es el presidente electo y por tanto para mi es un símbolo de la democracia en Honduras. Por tanto estoy a favor de que regrese al país y se le restituya. Como yo piensa muchísima gente hondureña que no es pro-Zelaya pero si pro-democracia.
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