Antes de llegar a Tegucigalpa, he hecho escala en Miami. El vuelo, que ha durado 10 horas, es el peor que he sufrido en mucho tiempo: ha habido turbulancias durante 2 horas y casi acabo vomitando. Rezaba para que no nos pillara el Niño, el Mitch, la Desi, la Juani o uno de estos famosos huracanes que suele haber en esta época.
De Miami he visto poco; ha llovido todo el tiempo. Pero al menos he tenido la oportunidad de conocer el lado hispano de los USA. Esto es como un oasis latino y es una gozada pasarme el día hablando español, rodeado de música latina y gente diciéndote "papito" aquí y "papito" allá.
Me he alojado en Ocean Drive, calle famosa por sus hoteles Deco. En general la zona es bastante hortera y recuerda un poco a Lloret de Mar, con el añadido de lo deprimente que son los sitios de playa bajo la lluvia. Mi vuelo a Tegucigalpa sale mañana y tenía previsto darme un bañito en la playa, pero va a ser que no.
1 comentario:
Bueno bueno, ahí va nuestro Willie Fogg particular, el Dr. Livingstone de los pobres, Indiana Jones de Bac de Roda... ese Labordeta y sus países en su mochila!!!
Mucha suerte por esas tierras del señor!!
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